CONVENTO DE LAS HERMANAS
DEVOTAS DE SAN DALIAS
Desestimado Sr. don José Ramón Calderón Ramos:
Me dirijo a usted como abadesa del Convento de las Hermanas devotas de San Dalias. Pongo en su conocimiento que en el cenobio, después del Señor y de San Dalias, somos fervorosas madridistas que llegamos al éxtasis con los triunfos del equipo blanco.
Me gustaría transmitirle en nombre de toda la congregación nuestro malestar por sus recientes palabras donde, entre otras lindezas, defiende la gestión del señor presidente del Fútbol Club Barcelona, don Josep Maria Bartomeu Floreta. Permítame recordarle que usted ha pecado de omisión siempre a la hora de defender al club que presidió, mas no le duele en prendas deshacerse en elogios hacia el máximo rival. Nuestra labor en esta vida terrenal no es juzgar, pero este comportamiento podría llevar a pensar que usted está resentido desde que hubo de abandonar la presidencia tras flagrantes y continuadas irregularidades.
En nuestra comunidad, nos dedicamos a la oración y a la manufactura de calzado. Y cada domingo, antes del crepúsculo, nos concedemos la licencia de analizar y debatir la semana futbolística. En estas tertulias, las hermanas liberan toda la tensión semanal que causa la oración y el uso del martillo de remendón y emana de ellas su ingenio, algo bribón en ocasiones, he de reconocerlo. Cada vez que usted aparece en nuestras conversación se produce una ebullición ambiental como si hubiesen llovido aspirinas efervescentes en nuestro lago de carpas. Esta tarde se han dirigido a usted como Conde Draco, trapacero asambleario o bocachancla. Ruego sepa usted disculparlas, sobre todo, no les tenga en cuenta este último calificativo, muy empleado aquí debido a nuestra labor. Eso sí, no tema por nuestras almas, tras cada cónclave futbolístico, nos confesamos y entonamos tres ¡hala Madrid!
Tras escuchar las palabras a las que hago referencia al comienzo del presente escrito, Sor María Jesús ha llegado a insinuar una posible conexión entre Bartomeu y Nanín, inefable personaje de infausto recuerdo para el madridismo y compañero suyo de fechorías que encarnaba los valores opuestos a los siempre defendidos por nuestro club. El resto de hermanas han recibido esta apreciación con jolgorio y han celebrado lo atinado de la ocurrencia. Tanto es así, que he ordenado Sor María Jesús quede esta semana liberada de sus labores habituales y pueda dedicar su tiempo al spa y al verdejo.
Tampoco ha pasado por alto para nuestra orden la puya lanzada al Madrid y en especial a Florentino Pérez, presidente del cual fue usted un mal sustituto durante apenas dos años. Asegura que «el Real Madrid regaló a Cristiano Ronaldo por cien millones». Entendemos su rencor, incluso hemos llegado a pensar, en pos de disculparlo, que le puede a usted provenir de su apellido, que le haya transmitido alguna característica de otro equipo de Madrid, pero no podemos admitir esta mentira. Cristiano fue fichado por noventa y seis millones de euros cuando era una estrella, pero aún joven y sin haber llegado al cénit de su carrera. Jugó nueve temporadas de blanco —y de otros colores utilizados en las segundas y terceras equipaciones— y marcó CDL goles. Ay, ruego me disculpe, otra vez se me ha ido el santo al cielo y he vuelto a escribir una cifra en números romanos. Como iba diciendo, marcó cuatrocientos cincuenta goles y ganó todos los títulos posibles con el Real Madrid. Máximo goleador madridista y jugador más importante en la historia del club tras Alfredo Di Stéfano. Su último partido en el equipo lo empleó en ganar otra Copa de Europa más. Después de estos logros, años y rendimiento, fue vendido a la Juventus de Turín por cien millones de euros. Es decir, cuatro (ocho dividido entre dos) más de los que había costado. Y después de estos datos irrefutables tiene usted las narices de decir que el Madrid regaló a Cristiano. ¡Váyase usted convento fresco!
Ruego de nuevo me disculpe, esta vez por mi tono, pero me sulfura, pareciera usted tener el alma más derruida que el estadio ribereño que le da apellido.
Atentamente,
Sra. Dña. Inmaculada Blanca y Pura.
Abadesa del Convento de las Hermanas devotas de San Dalias
Estimado Paco, me quito el sombrero con tu artículo, te ha quedado tan redondo como las caras de las hermanas de la foto. Me has hecho reir, y así olvidarme un poco de lo que me cabrea este ex-presidente infame cuando abre su bocota. Vergüenza le tendría que dar, pero ya sabemos que de eso no tiene.
Saludos y ¡Hala Madrid!
¡Gracias, estimada Cibeles!
Saludos y hala Madrid.
Qué grande, Paco!!! Y me pasa como a Cibeles, que pese a ponerme de mal humor siempre que oigo algo de ese sujeto, hoy ha sido todo lo contrario, me he partido de risa..
Me alegro, Paz. Menudo espécimen Calderón.
Saludos.
Otra muestra más de que la prensa deportiva española es un albañal. Cuando los distinguidos juntaletras quieren carnaza, llaman a Gaspart o en este caso, al tipejo que más hizo por el Barcelona.
Aunque el artículo es muy divertido y pone en su sitio al personajillo, creo que la mera mención de este tiparraco en La Galerna hace que nos saque un momento de nuestro estado de felicidad actual.
Solo quedan unas horas para terminar el increíble agosto. Disfrutadlas todos los madridistas.
Otro madridista antimadridista. Madre mía, cuántos hay. En el convento, Sor Prendida no sale de su asombro por las declaraciones.
Ja ja jaaaa
No ha estado mal. Ni el texto,ni la foto finish. Digna de ser puesta como fondo de pantalla como manifiesta demostración del fervor y pasión que desata el Real Madrid por doquier.
Menudo pájaro Don Ramón, sin duda de lo peor que pasó por aquí. Era el preferido para el grupo Prisa, por algo sería.
Menudo pájaro Don Ramón.
Cada vez que lo veo alrededor del Málaga, me pongo a temblar. Como puede este personaje asesorar a una empresa seria?
"Es decir, cuatro (ocho dividido entre dos) más de los que había costado."
¡Jajaja, muy bueno!
Y que Sor Teo no le depare a la Farsa el año que viene otro cruce con el Bayern.
El sentimiento blanco único y verdadero no deja lugar a la disensión.
Normal en este equipo en el que la disensión Interna es eliminada y vilipendiada poniendo cara de monjita redentora.
Espero que la lata de sardinas que estáis construyendo entierre definitivamente vuestra vanidad y dejeis de pecar en esta tierra con vuestros embustes, tejemanejes de alcahuetes con la prensa del movimiento o blanco y, sobretodo, dejéis de robar al resto de equipos.
Hermanas, estáis abrazando a Satanás, cuidado con vuestras almas, que habéis hecho voto de pobreza y humildad, palabras que ese club al que pareces ligar más que a vuestro señor Jesucristo no conoce.