El primer Clásico será en el Camp Nou, pero a puerta cerrada
Se sorteó el calendario de la Liga 2020/2021 y lo viví con distancia, como si fuera algo intrascendente. Quizá el hecho de haber terminado hace media hora la anterior temporada tiene algo que ver. El fútbol se metió en la centrifugadora tras el confinamiento y uno no sabe si viene o va, tanto para el Real Madrid como para el resto.
La propia Champions League empezó su nueva campaña -las fases previas- cuando ni siquiera había terminado la anterior. Una locura, vaya. Una locura que abrazamos gustosamente dada nuestra enfermedad por el fútbol, pero no deja de ser un huracán que nos ha pillado a todos en medio.
Volviendo al principio, mi reflexión sobre el calendario de la próxima Liga tiene muy poco que ver con el que hice años anteriores. No existe el factor campo -al menos de momento-, tampoco la ventaja o desventaja de jugar en casa los partidos fuertes ahora o hacerlo a partir de febrero. Sabemos que ahora se hará bajo el silencio de la grada, con jugadores animando y sin público, pero desconocemos si a mediados de temporada se mantendrá el guión o ya empezará a haber gente en los estadios. Sea como fuere, y por mucho que las gradas vayan poblándose poco a poco, el contexto no tendrá nada que ver con el habitual.
Así las cosas, y repasando fechas, partidos, estado actual de los equipos y demás, mi conclusión, seguramente precipitada y atropellada, es que el Real Madrid tiene un sprint de diez partidos en el que puede dejar mucho camino hecho si no se tuercen las cosas. Real Sociedad, Betis, Valladolid, Levante, Cádiz, Barcelona, Huesca, Valencia, Villarreal y Alavés serán los primeros rivales del equipo de Zidane -excluyo al Getafe porque todavía no hay fecha para los choques aplazados de la primera jornada-. El Clásico será en el Camp Nou, pero a puerta cerrada, situación que le resta mucho impacto, tanto a nivel ambiental como emocional. Fuera de eso, y a la espera de ver cómo responden los equipos y cuáles de ellos superan las expectativas -o al contrario-, lo cierto es que esos primeros novecientos minutos no parecen presentar una exigencia desmedida. Sí, el Real Madrid ha sido experto en resbalar ante rivales de segunda fila en aquellas Ligas que escaparon demasiado pronto, pero entiendo -o deseo- que no será el caso.
al Real Madrid se le presenta una oportunidad de oro para dar un puñetazo sobre la mesa antes de que acabe 2020. Es complicado que los rivales directos vayan a estar a la altura de las circunstancias en los primeros meses
Aprovechar la ausencia temporal de público, casi segura en esos primeros diez partidos, para poner algo de tierra por medio respecto a los rivales más inmediatos, se antojaría oportuno y casi necesario. Ya se demostró en la Liga del Covid, que el Madrid se adjudicó con solvencia en medio del silencio, que las gradas vacías favorecen especialmente a su juego, tanto jugando como forastero (se acabaron las clásicas encerronas de públicos calientes amedrentando a jugadores y árbitro) como haciéndalo de local: sortear el tradicional runrún de la masa de abonados blancos ha probado ser una circunstancia beneficiosa. Aunque suene triste.
Con el Barcelona en plena Guerra Civil todavía sin resolver, el Atlético de Madrid inmerso en un mar de dudas -silenciadas por la prensa, como siempre-, el Valencia desmantelado y deprimido y el Sevilla como rival casi directo si consigue un ‘nueve’ de garantías, al Real Madrid se le presenta una oportunidad de oro para dar un puñetazo sobre la mesa antes de que acabe 2020. Es complicado que los citados -salvo el Sevilla, repito- vayan a estar a la altura de las circunstancias en los primeros meses, por lo que el actual campeón debería aprovechar la tesitura para abrir brecha y luego jugar con ello a partir de ahí.
En una Liga con estadios vacíos y sin factor ambiental, las claves pasan por el ahora. Ahí es donde el Real Madrid parece estar en ventaja, más aún con Odegaard en plantilla. La temporada será larga, pero esos primeros novecientos minutos pueden valer para encarrilarla.
Ojala , desde que se juega sin público se ve que les arbitres están menos presionados y están siendo más justos , creo que si no hubiera sido por los estadios vacíos el Madrid no hubiera sido campeón ni de coña .
Vaya desde aquí un descariñado saludo a ese aparato moderador y al que lo maneja , si lo que quieren es parecerse a los fascistas , lo van consiguiendo . Animo que seguro que podéis .
Fijaos en qué situación de ruina moral y material hemos llegado en España, que nos beneficia el hecho de que no haya público ni propio ni ajeno. Triste pero cierto.
En el relato oficial del Régimen el Real Madrid es el malo.
Mucho se habla sobre la envidia y que el Real Madrid ya era odiado en tiempos de Bernabéu. La realidad es que ahora no hay campo en el que no sea recibido con hostilidad, mientras antes clubes como Valencia o Betis se podían considerar amigos. ¿Quién es, hoy en día, club amigo del Real Madrid?
Dejando de lado el factor público, el equipo necesitará salir con mucha intensidad y sin confianzas.
Lo malo es, que o mucho cambia la cosa o en ataque dependeremos en exceso de los goles de Benzema y te daremos porque esté a la altura de la temporada anterior (el mejor jugador del año).
Necesitamos el aporte de goles de Vinicius, Rodrygo, Jovic (si Zidane le da minutos) o lo pasaremos mal si Benzema se lesiona.
Efectivamente, viendo el calendario de las diez primeras jornadas (9 en realidad par el Madrid y 8 para el Barça) nos resulta muy favorable. El Madrid tiene en general partidos asequibles que haría muy bien en mentalizarse para ganar todos, mientras el Barça deberá disputar bastantes partidos complicados, sumandose además el no poder contar con Stegen las primeras jornadas.
No sería en absoluto extraño, viendo el panorama, adquirir una buena renta hasta la jornada 10, más o menos, lo cual nos daria dos beneficios: para nosotros tranquilidad y margen de maniobra; para el Barça, multiplicar las dudas con las que ya afrontan la temporada.
Estoy de acuerdo en que la falta de público nos favorece PERO creo que, por una vez, favorece más a la Farsa. ¿Se imaginan la reacción del público del Nou Camp ante un par de resultados negativos con el caldo de cultivo actual?