Buenas vibraciones

Así se gana a cualquiera, porque todas las líneas funcionan. En defensa Carvajal siguió siendo la amalgama de defensor rocoso y puñal atacante, y Nacho suplió con toda solvencia al enorme Ramos; siempre se le pareció por contundencia y gol, y tras dejar atrás una antigua e insidiosa lesión da gusto ver cómo esprinta y pasa. Varane quizá sea el fichaje más rentable del Real, que lleva siete años en la cumbre y podría seguir otros tantos, cosa totalmente insólita, y lo único que echo de menos es su eficacia goleadora en córneres y otros centros a balón parado. La sensación de inseguridad con los pies arrastra la inercia de tres errores trágicos y recientes, dos de ellos contra el Manchester United, aunque quien tiene boca se equivoca.

La media madridista es quizá insuperable, y probablemente así será recordada. Casemiro volvió robar con eficacia escandalosa, además de achuchar en ataque, y los adjetivos se quedan cortos para el balón de oro merengue y su colega, un monstruo del pase y el tempo. Hace un par de años parecía cansado de ganar, o al borde de sus fuerzas; pero desde entonces no hay jugador más esencial para el equipo.

Arriba Benzema no acabó de estar ni esta noche ni en la del Elche al nivel supremo acostumbrado, pues pudo marcar en un par de ocasiones que lanzó fuera. Sin embargo, ambos extremos estuvieron excelentes, hasta el punto de ser los únicos goleadores y a la vez protagonistas de las asistencias. Lucas reconfirmó su clase precisamente, algo que poníamos en duda durante años cuando era en realidad falta de confianza; y no coincido con quienes consideran elemental su cabezazo —a despecho de ser un caramelo el centro—, porque nos hemos hinchado a ver falladas tales ocasiones, en las cuales es preciso dirigir la pelota con un margen de precisión no superior a dos palmos. Asensio hizo a mi juicio el partido más convincente desde la reaparición, mostrando que su quiebro para irse en vertical y centrar es imparable, y brilló por defender y atacar casi con rabia, exhibiendo lo más infrecuente y por eso mismo alentador.

No diré lo mismo de Odegaard, Valverde, Vinicius y sobre todo Hazard, aunque salieron casi diez minutos después de lo previsto, que ya era tarde. Si el equipo sigue así de enchufado, no me extrañaría que conservase el provisional liderato, antes o después.

Fotografías: Getty Images.