Para que no haya lugar a equívocos comenzaré advirtiendo que, tras muy escasos partidos de pretemporada, aún es pronto para sacar conclusiones. En esta fase, lo básico es ir adquiriendo la base física necesaria para competir durante todo el año e ir asimilando los conceptos tácticos del entrenador. Es en esto último en lo que se quiere adentrar este artículo, aunque sea de un modo aún preliminar.
Muchos presumíamos que con la llegada de Benítez la fisonomía del Madrid de los dos últimos años cambiaría. Creo que no nos equivocábamos. Pese a que no ha habido grandes variaciones en la plantilla en cuanto a incorporaciones de relumbrón, han bastado unos pocos amistosos para empezar a encontrar diferencias con el Madrid de Ancelotti.
Mientras el Madrid de los dos últimos años partía con un 4-3-3, con centro del campo en triángulo casi equilátero, el de Benítez alterna un 4-2-3-1 con un 4-4-2 muy puro. El esquema no necesita de cambios de jugadores para variar, ya que las permutas entre los mismos son constantes a lo largo del juego y parecen sintonizar de forma inmediata el cambio de frecuencia ordenado por su nuevo entrenador.
El Madrid de Ancelotti, en ataque, solía jugar mucho con las alturas. Ramos se incorporaba al centro del campo, y a su vez James ganaba otra altura tendiendo un puente entre el centro del campo y la delantera. Arriba la BBC permanecía bastante descolgada con Bale siempre en la derecha y con el clásico movimiento hacia atrás de Benzema que liberaba el centro del área a Ronaldo, pero que a su vez le quitaba mucho oxígeno a un Bale que se encontraba con mucho tráfico cuando recortaba hacia el interior para chutar. A pesar de ese pequeño hándicap, el Madrid funcionaba como un reloj, ya que la calidad de sus jugadores le permitía asumir los riesgos consustanciales a su ambicioso y desacomplejado despliegue. Dada la poca calidad defensiva de la mayoría de sus jugadores, Carletto optaba por intentar recuperar el balón muy arriba y de forma diligente. El escalonamiento de sus jugadores- facilitado por las diferentes alturas- favorecía el robo del balón o que se retardase la transición del contrario. Todo se empezó a resquebrajar cuando Modric, James y Ramos -capitales en el esquema- se lesionaron a la vez, y la calidad del equipo se resintió sin que Carletto abandonase su ambicioso, estético y efectivo plan. No había un plan B, sino un plan A matizado y de peor calidad.
Benítez ha parecido tomar buena nota de ello. Aparte de las rotaciones que presumiblemente veremos, ha perfilado otro estilo que protege más al equipo en defensa. En estos primeros trazos se aprecia menos escalonamiento en ataque, es decir, menos alturas. El doble pivote parece bastante estable y rectilíneo, y si bien Ramos parece que sigue incorporándose al centro del campo, dicho movimiento parece más fruto de la personalidad del camero que del plan trazado. En ataque, las permutas del los cuatro de arriba sí son constantes. El defensor rival no tiene suficiente con estudiarse a un sólo rival: es probable que durante el partido marque a cuatro diferentes. En una misma jugada, la posición inicial de cada jugador sólo marca su punto de partida, ya que es habitual ver cómo Isco de la derecha pasa al centro y posibilita el que Bale, quien empieza en el centro, acabe entrando por la derecha. Lo mismo ocurre entre Ronaldo por la izquierda y el delantero que juegue -Jesé o Benzemá- que muchas veces hace la cobertura defensiva a un Ronaldo que, pese a su renovada y buena actitud, no siempre vuelve.
Cuando el equipo pierde el balón, no inicia una presión adelantada para recuperarlo. Habitualmente, el Madrid desconfía de esa posibilidad y se repliega buscando unir las líneas. Esa parece la obsesión de Benítez: líneas juntas y a la altura que sea para que el sistema de ayudas defensivas sea más efectivo y los esfuerzos menos prolongados y estériles. Es probable que cuando el equipo alcance su mejor condición física, la línea de presión se adelante considerablemente - sería coherente con la línea que ha seguido Benítez en su carrera-, pero será difícil ver a este Madrid partido y concediendo líneas claras de transición hacia su portería. Con Benítez el Madrid parece permanecer junto.
Sin abusar de ello, sí parece que Benítez quiere recuperar, en parte, la verticalidad del Madrid de Mou. Cuando se produce el robo, este Madrid enseguida busca la jugada rápida, pero sin arriesgar una pérdida irresponsable. Seguro que será objeto de una entrada futura, pero el papel de Bale como lanzador de esas contras se antoja que será muy relevante. El reto del galés será ser más un lanzador que un conductor y muchas veces acabar él la jugada tras descarga de sus compañeros.
Habrá que seguir analizando si esta apuesta quizás menos preciosista y ambiciosa se vuelve más pragmática. De momento los resultados no le quitan la razón a Benítez, y eso que aún casi no ha podido contar con Don James Rodríguez, el jugador que sólo sabe marcar goles bonitos.
Me parece un muy buen análisis de lo que ha dejado ver el equipo, especialmente en las primeras partes.
Parece que se empiece los partidos con la prioridad de contener y evitar errores de concentración, para luego adelantar la presión a media primera parte y tratar de recuperar en el medio.
Y en las segundas partes, con un equipo con más "suplentes" (las rotaciones nos dirán cuán suplente es cada cual), y más orientado al control de balón, el equipo más arriba.
Todo ello teniendo en cuenta que hablamos de partidos de pretemporada y de que el equipo aún no está en el punto físico necesario.
Lo que parece claro es que con Benítez será preferible mantener el balón y empezar de nuevo jugada, que ir al asalto sin cabeza. La sensación de blindaje es potente, claro que eso también nos hace más lentos para hacer las transiciones si no hay desplazamientos en largo a la espalda de la defensa contraria, aprovechando espacios.
Es prematuro, como dice D.Ramon, el analisis pormenorizado de las diferencias entre el Madrid de Rafa y el de Carleto. Aun asi atisbo un equipo mas sólido, fiable,equilibrado,ordenado,trabajador y disciplinado que el de la temporada pasada. Parece,por lo visto hasta ahora, que las lagunas y los bajones en el juego a los que nos tenia acostumbrado Carleto durante los partidos pasan a la historia de lo cual nos congratulamos.
Buenos análisis de ambos.
Je,je,je... la teoría de los dos puentes de Ecos del Balón, eh? Yo también la leí, muy buena! Volviendo a tu artículo, coincido contigo, ya se veía venir de lejos que Benítez era muuuuuy diferente a Ancelotti, esperemos que para bien, por supuesto. Felicidades por el artículo y por la página!
Muy buen análisis. Yo lo q encuentro a este equipo en lo poco q he visto es q tenemos pocas ocasiones de gol.
Muy buen análisis. Yo he visto muy poco al equipo pero lo poco he visto lo que más me ha llamado la atención es las pocas ocasiones de gol q hemos generado
La diferencia es que Ancelotti jugaba con un 4-3-3 mientras que Benitez juega con un 1-4-2-3-1 o con un 1-4-4-2, es más. podría jugar con un 1-4-3-3 que partiría con una ventaja clara sobre Ancelotti.
Muchas gracias por todos vuestros comentarios, incluido el de mi tocayo. Uxi, veremos si la menor generación de ocasiones se debe a que estamos en pretemporada (y a veces las condiciones del césped y climatológicas no han sido las idóneas) o a que la mayor rigidez de Benítez tiene esta consecuencia.
Muchas gracias por vuestros comentarios. Uxi, yo creo que en la escasa generación de ocasiones han influido factores externos (baja forma, campo malo, temperatura, etc). Habrá que valorar si esto sigue. En ese caso, si podría atribuirse a la rigidez de Benítez.
Este año se tiene entrenador. El sistema de escalonamiento es una chapuza táctica que debe ser parte de un sistema que incorpore bastantes mas variantes y "automatismos" en el juego,con el objetivo de lograr un posicionamiento correcto para desplegar una mecánica de juego concreta en cada momento del partido y en cada etapa de la fase defensiva u ofensiva. Ancelotti colocaba un dibujo con 10 jugadores prácticamente intocables. Si ya era deficiente el sistema de por si, con escasos conceptos tacticos en el juego, se le añade el que se jugaba con el mismo sistema desde el primer partido de pretemporada hasta el ultimo de liga, y lo que es mas grave con el mismo dibujo y movimientos desde el primer minuto hasta el ultimo del partido fuera el rival que fuese e hiciese lo que hicera, y así lo único que se consiguia era darle una ventaja táctica enorme al entrenador rival, que ya se pago con el Atlético y con la Juve en semifinales. No había un equipo realmente entrenado, estaba exento de estrategia y preparación táctica. Esto con Benítez ha cambiado y se ha visto desde ya. La organización y sobre todo lo bien trabajado de los movimientos tácticos de los jugadores han hecho a un equipo con el que es bastante mas difícil llegar al medio circulo del area. El despliegue de ayudas en defensa es muy satisfactorio, la presión constante y bien distribuida del conjunto del equipo es muy satisfactoria, esos triángulos de presión que ejerce la segunda linea con ayuda de un defensa si es necesario y siempre un jugador cubriendo las zonas que dejan libres los implicados (no como aquella presion del primer año de Ancelotti que consistía en un jugador, generalmemte solo los dos interiores corriendo como pollo sin cabeza cuando la tenia el equipo contrario en su zona) es un muy buen trabajo del entrenador. Ahora se disfruta hasta viendo al Madrid defender. Benítez esta superando con creces a su antecesor en trabajo, y eso que solo hemos podido ver el trabajo de tres semanas en cuatro pachangas veraniegas.
Este año se tiene entrenador. El sistema de escalonamiento es una chapuza táctica que debe ser parte de un sistema que incorpore bastantes mas variantes y "automatismos" en el juego,con el objetivo de lograr un posicionamiento correcto para desplegar una mecánica de juego concreta en cada momento del partido y en cada etapa de la fase defensiva u ofensiva. Ancelotti colocaba un dibujo con 10 jugadores prácticamente intocables. Si ya era deficiente el sistema de por si, con escasos conceptos tacticos en el juego, se le añade el que se jugaba con el mismo sistema desde el primer partido de pretemporada hasta el ultimo de liga, y lo que es mas grave con el mismo dibujo y movimientos desde el primer minuto hasta el ultimo del partido fuera el rival que fuese e hiciese lo que hicera, y así lo único que se conseguia era darle una ventaja táctica enorme al entrenador rival, que ya se pago con el Atlético y con la Juve en semifinales. No había un equipo realmente entrenado, estaba exento de estrategia y preparación táctica. Esto con Benítez ha cambiado y se ha visto desde ya. La organización y sobre todo lo bien trabajado de los movimientos tácticos de los jugadores han hecho a un equipo con el que es bastante mas difícil llegar al medio circulo del area. El despliegue de ayudas en defensa es muy satisfactorio, la presión constante y bien distribuida del conjunto del equipo es muy satisfactoria, esos triángulos de presión que ejerce la segunda linea con ayuda de un defensa si es necesario y siempre un jugador cubriendo las zonas que dejan libres los implicados (no como aquella presion del primer año de Ancelotti que consistía en un jugador, generalmemte solo los dos interiores corriendo como pollo sin cabeza cuando la tenia el equipo contrario en su zona) es un muy buen trabajo del entrenador. Ahora se disfruta hasta viendo al Madrid defender. Benítez esta superando con creces a su antecesor en trabajo, y eso que solo hemos podido ver el trabajo de tres semanas en cuatro pachangas veraniegas.
Muy interesante lo que comentas us1. Muchas gracias por tu aportación.