El Real Madrid ganó tres Champions League seguidas de la mano de Zinedine Zidane, pero seguramente el título de Liga cosechado en la temporada 2016/2017 esté en un lugar privilegiado dentro de la memoria del técnico francés. Él siempre defendió la importancia del campeonato doméstico, ya que considera que el día a día es lo que hace crecer a un equipo. También suele recordar la enorme dificultad de un torneo de 38 partidos en el que se premia la regularidad. A Zidane, en definitiva, le gusta la Liga, siempre le ha gustado. Él es 'Mr Champions', pero no oculta el extraño cosquilleo que recorre su cuerpo cuando el esférico echa a rodar sábado y/o domingo.
Este texto ya estaba pensado y había sido más o menos elaborado antes de conocer la convocatoria para la Supercopa de Arabia Saudí. Comento esto porque en dicha relación de futbolistas no están Benzema y Bale, que se unen a Hazard en la lista de bajas del Real Madrid. Soy de los que piensa que, en condiciones normales, ambos -Karim y Gareth- estarían en la cita, pero, pese al cartel, el ruido y el posible Clásico en el horizonte -el Barça se mide al Atlético de Madrid en la otra semifinal-, Zidane ha decidido que lo realmente importante, sobre todo en enero, es una Liga en la que, además, comparten liderato con el eterno rival. Después de haber naufragado en las últimas dos campañas, la 'obsesión' es reeditar lo vivido en la 2016/2017 y recuperar el trono nacional.
Sé que muchos madridistas no comparten la fijación del entrenador del Real Madrid por la Liga. Consideran que es una competición manchada, tiene un envoltorio mediático demasiado tóxico y cuenta con unos arbitrajes a todas luces perjudiciales. Sin embargo, un servidor sí cree, como Zidane, que el torneo de andar por casa es importante y, sinceramente, ilusionante.
Dejando a un lado la ilusión que pueda desprender la conquista de una Liga demasiado teñida de blaugrana, lo cierto es que, en la mencionada 2016/2017, Zizou se inventó una revolucionaria gestión que le permitió mantener a casi todos los futbolistas enchufados gracias a las rotaciones. La mal llamada 'Unidad B' sacaba adelante muchos partidos ligueros sin necesidad de que los aparentemente indiscutibles tuvieran que intervenir de forma decisiva. Eso generó una enorme dosis de confianza que acabó repercutiendo de manera muy positiva en el transcurso de la temporada.
Sí, sé que ya no está Cristiano Ronaldo y que, pese a los descubrimientos de Fede Valverde o Rodrygo, por poner varios ejemplos, esta plantilla tiene menos nivel que aquella, pero, con todo y con eso, Zidane vuelve a tener ese cosquilleo por la Liga y tiene pinta que hará una gestión parecida a la de la temporada del doblete. Entiendo su 'obsesión' y la comparto. Hay que acabar con la hegemonía del Barcelona en España.
No está Cristiano. Y Bale, muy a mi pesar ha dejado de ser determinante, de momento. Pêro tenemos una pedazo de plantilla. Los jóvenes son muy jóvenes con una calidad excepcional. Ha llegado la hora de Jovic. Hazard es la baja más significativa, jugador clave, él sólo atraviesa 2 líneas (que ha sido la clave del barsa con Messi), con un delantero centro y un centrocampista llegador, como puede ser Valverde, el Madrid gana muchas opciones. Atentos a esta situación, que en Champions puede ser determinante.
Y Zidane, que pedazo de entrenador, lider silencioso, su simpleza le magnifica, y su forma de sorprendernos a todos. Sus retractores es que no sabe de futbol, que es alineador. Que sigan, seguro que ellos sabenm más.
El presente nos mantiene expectantes, pero el futuro es muy ilusionante.
La Copa ésta pues como siempre, si la ganamos no valdrá nada y si la perdemos pues tratarán que nos amarguemos diciendo que no hay gol y que Zidane no tiene alternativas.
Si pero por lo pronto en la liga nos han birlado 7 puntos por cuestiones de VAR asi que si sigue la progresión al final de temporada 14 puntos al limbo
O sea, Zidane deja a Karim y Gareth porque no le interesa la Supercopa, y si los lleva, o la va a ganar o va a desgastar a los dos jugadores. Madre mía Quillo, he visto artículos malos, pero este se lleva la palma.
Como diría Jack el destripador, “vayamos por partes”.
Primero, los madridistas sí queremos ganar la liga.
Segundo, la liga “española” está adulterada de una manera tremenda en favor del club representante de los anti-españoles.