El Barça llora sin sus chuches

El Barça es un adicto a las inyecciones de puntos arbitrales de dudosa procedencia legal y en tan solo un puñado de partidos en los cuales no ha recibido su dosis, presenta claros síntomas de síndrome de abstinencia. Lo mismo ocurre con la inefable prensa culé e incluso la madrileña, infestada de antimadridismo.

Este comportamiento errático provocado por la retirada de suministro de dopaje barcelonista y la no castración, hasta hace semanas habitual, de goles y penaltis legales a favor del Madrid, lleva a Marca a sufrir paranoia y decir que «El Madrid estalla tras decir Bartomeu que el VAR siempre favorece a los blancos”. No, Marca, el Madrid no ha estallado, tal vez haya estallado un señor moreno con reloj aficionado madridista del 3º A de la escalera derecha de una calle del barrio de Moratalaz, pero el Real Madrid como institución —como sugiere Marca— no ha estallado. En ese titular, quien ha estallado es Bartomeu, cuyo comportamiento es el del niño mimado y consentido que jamás ha recibido un no y ante el primer día que su papá le dice que no le compra chuches, monta en cólera.

Para colmo, resaltan las palabras «Es rabia y envidia» dando a entender que se dicen desde el Real Madrid. Pero ¿quién las dice, señores de Marca? No pueden lanzar la piedra y esconder la mano. Para ilustrar sus acusaciones, muestran una pantalla borrosa de VAR observada con un árbitro que porta un objeto cilíndrico erecto cerca de sus nalgas. Y ya en letra pequeña, siguen haciendo el caldo gordo a los culés, resaltando que el portavoz del Barça insiste en que se ha beneficiado a un equipo con el VAR. Tiene que ser el mismísimo Simeone quien ponga un poco de cordura y alabe la justicia del VAR y descarte ningún tratamiento de favor al Madrid. Tiene bemoles la cosa. Ya solo falta que nos defienda Stoichkov.

Ojo, la lluvia de paranoia y quejidos ñoños se está produciendo tan solo después de unos cuantos partidos sin ayuda clara al Barcelona y sin palos en las ruedas al Madrid. Vamos, después de unos partidos en los que se han reducido los errores que durante lustros han beneficiado al equipo catalán y han perjudicado al madrileño. No queremos pensar el río de lágrimas y pataletas que puede acaecer si se mantiene un funcionamiento arbitral con pocos errores.

Para no perder la costumbre, Sport llega a los quioscos con otra portada enlutada y lastimera; «Basta ya» y el catálogo típico de quejas: clamor en el fútbol español por las ayudas al Madrid, indignación en el Barça que lo denuncia para defender sus derechos, el Madrid ha sido beneficiado en siete jornadas seguidas, Tebas critica la —supuesta— llamada de Florentino a Rubiales para presionar por el VAR.

Es todo de un ridículo sonrojante, aunque comprensible desde un punto de vista psicológico. Durante solo siete partidos, le han quitado al Barcelona su juguete y a la prensa antimadridista su goce. Tal privación repentina de estas sustancias provoca en ambos un mono indisimulable que genera trastornos del sueño, alteración de movimientos, sueños vívidos desagradables, alucinaciones. Pero nada que no pueda ser tratado por un especialista, aunque, en todo caso, tardaría en curar; unas dos o tres generaciones, ya que es algo que tiene interiorizado el barcelonismo, la aversión a la justicia. Siempre han sido proclives al pacto al margen de la ley.
Por cierto, al igual que Marca, también publican una fotografía de un árbitro con un objeto con forma de pepino vertical en las inmediaciones de su trasero.

Mundo Deportivo destaca un deseo más que una noticia; dan vueltas acerca del posicionamiento en el campo del tridente y las mejoras que desean que ello conlleve. Aunque está claro que este tridente sin azúcar no es como el del anuncio y no lo recomiendan nueve de cada diez dentistas.
En la parte superior de la portada, aparecen Bartomeu y Jasikevicius con una camiseta que hace apología de las Saras. Nos parece bien, es un nombre bonito de mujer.

La noticia que más nos sorprende es que la auditoría sobre el caso de las redes sociales exculpa al club de cualquier irregularidad. No podíamos imaginar una conclusión así, tardaremos en reponernos del shock. ¡Ambrosio, traiga las sales!

Y como no pueden hacer una portada sin lloriquear por el VAR, insertan la cuota de queja habitual en la que dicen que Tebas admite que el domingo el videoarbitraje no tuvo su día. Tal vez Tebas debería volver a Egipto, de donde nunca debió salir, y dejarnos tranquilos a nosotros y a la propia competición que él organiza.

Terminamos con el As, que es el único que no sufre berrinche y titula que el Madrid es líder con y sin VAR, incluso recuerda los dos penaltis no señalados a Varane en el Camp Nou. Se agradece.
Disfruten ustedes de otro martes como líderes y esperemos no volver al Antiguo Régimen de VAR.