Ay, capitán, ¿mi capitán?

Que nos perdonen los capitanes (?) del Madrid, los candidatos a la presidencia del Barcelona e incluso Messi, pero nuestro máximo interés está hoy en la cartilla que ofrece Marca a sus lectores. Estamos muy lejos de querer hacer publicidad, pero es que se viene la Thermo Multifunción Cecomix V. 2., y comprenderán ustedes que el verano ya sea otro, que la vida se vea de otro manera, aunque solo sea por aquello de que las penas con pan son menos penas.

De no interesarnos la Thermo Multifunción Cecomix V. 2. ya nos dirán ustedes qué podría hacerlo de la portada que nos brinda hoy Marca. "¿Y qué hacemos con el brazalete?", es la pregunta destacada ante la posible marcha de Casillas y Ramos; pregunta con la que se abre un debate que el Diario de la Hernia dice que no abre él, sino que ya está abierto en el Madrid. Así, en general. Una vez más -la enésima más una- el "alguien ha matado a alguien" que da sustento resbaladizo y eterno a nuestra prensa deportiva. Mucho nos tememos que el asunto Ramos y Casillas va a seguir trayendo cola (y, ay, portadas) precisamente después de que se cierre tal asunto, es decir, después de que, finalmente, se confirme que ambos se quedan en el Madrid; pero reconocemos que estamos tan solo especulando con un final que aún no se ha dado. En todo caso, podría decirse que la pregunta de Marca ya ha sido respondida con displicencia por ambos capitanes (?). Si Casillas parece haber estado respondiendo poco a poco durante demasiado tiempo, Ramos ha llamado la atención con un posicionamiento más súbito y sorpresivo, aunque aquellas faltas de compromiso y/o de tensión que el sevillano reconocía tras algunas importantes derrotas ya anunciaban que el brazalete podía acabar hecho unos zorros, con perdón de la tal vez muy pertinente expresión. Polémicas turbiedades al margen, si la capitanía no solo es cuestión de veteranía, sino también de compromiso, identificación y ejemplaridad, ¿alguien tiene el teléfono de Lukita?

La respuesta "urgente y evasiva" que dice As que dio Ramos sobre su situación confirma lo dicho en el párrafo anterior. Parece tener prisa Sergio este verano, como muestra incluso la imagen de portada del Diario de la Ouija (qué calor, por cierto, al ver al defensa con chaleco y corbata). Le quedan a Ramos dos años más de contrato, pero -para el asombro de buena parte de la afición- parece urgirle renovar ya, por supuesto, al alza. Y todo es evasivo en este lío, todo es apenas sugerido, entrevisto, casi adivinado. ¿Se ofreció Ramos (o el ínclito René) al Barcelona? ¿Le ha comunicado al club que le trasladen las posibles ofertas que reciba por él? ¿Quiere irse? ¿Sabe jugar al mus? Queda claro que poco queda claro, salvo que la afición no ve la necesidad de esta urgencia ni, sobre todo, de esta evasiva; afición romántica, dirán tal vez Sergio o René, afición que pediría a un capitán del Real Madrid mayor claridad de planteamientos y menos juegos subterráneos, mayor contundencia y menos florituras (más o menos lo mismo que cabe pedir, porque sabe hacerlo bien, a su fútbol).

Pese a que coincidan los dos temas principales de las portadas de Sport y Mundo Deportivo, difiere el tratamiento que hace cada medio de tales asuntos. Nos reconocemos asombrados (y acaso decepcionados) ante la asepsia informativa que muestra hoy Sport en sus titulares: pulcritud máxima en la elección de las palabras, ausencia de retórica, mera información aparentemente no valorativa, y por supuesto ningún atractivo en forma de Thermo Multifunción Cecomix V. 2. ni similar. Eso sí, si para Mundo Deportivo el tema estrella(do) del día es la derrota de la Argentina de Messi en la Copa América, Sport guarda mayor espacio para la presentación de firmas de los candidatos a presidente blaugrana, destacando que Bartomeu casi dobla a Laporta en rúbricas. Con ello, tal vez sea sutil Sport, y tal vez porque quién sabe quién ganará al final y, lo haga quien lo haga, Sport querrá seguir editando periódicos, con lo cual no es inteligente tomar partido claramente por uno de los candidatos y que luego el acceso al club sea más problemático y ya saben ustedes... En resumen: tal vez sea sutil Sport, tal vez no se vea muy claramente lo que quiere, pero no tanto como para no hacernos adivinar por quién late su corazoncito.

Frente a la prosa funcionarial de Sport, se alza, lírico, Mundo Deportivo, con un "no llores por mí" que ilustra la decepción de Messi ante otro batacazo como líder de su selección. Qué titular tan bien traído. Qué poco obvio. Solo esperamos que lo lea Maradona mientras nosotros pasamos el domingo con la Thermo Multifunción Cecomix V. 2.