La Galerna nació desde su fundación con aspiraciones de ejemplaridad en el uso de un registro dialéctico respetuoso que descartara el insulto, la chabacanería, la calumnia y la maledicencia. Dijimos siempre sí a la ironía como mecanismo frecuente y a la contundencia como recurso necesario de forma ocasional, pero cuidándonos siempre de no traspasar líneas rojas que, aunque a veces borrosas o discutibles, son en el fondo mucho más susceptibles de someterse a consenso de lo que parece. Desde el comienzo tuvimos claro que estas líneas rojas no podían ser traspasadas ni en los editoriales o portanálisis, ni en los artículos, ni en las entrevistas... ni en los comentarios de los participantes. Desgraciadamente, es en este último punto donde -lo confesamos- cada vez cuesta más mantener el control de la situación. Cada vez cuesta más compaginar la observancia de esta regla con la libertad de expresión. Y si es así es, obviamente, porque algunos de nuestros lectores no tienen en cuenta dicha regla cuando se convierten en opinadores.
Afortunadamente, generamos un enorme interés en nuestros lectores, cuyos frecuentes, entusiastas y en ocasiones extensos comentarios a nuestros artículos tanto agradecemos. Sin embargo, y dada la actual tendencia al tono faltón y el insulto gratuito, necesitaríamos (algo que no podemos permitirnos) una persona dedicada ocho horas al día a filtrar los comentarios. En nuestros inicios, uno de nosotros se dedicaba a editar los comentarios eliminando insultos o groserías, para a continuación informar al censurado (no vemos por qué no llamarlo orgullosamente "censura") de aquello que había sido eliminado y de por qué había sido eliminado. En este momento, con la cantidad de comentarios y su extensión, no damos abasto en la aplicación de esa política. Se nos ha llegado a acusar de no ser realmente madridistas por haber eliminado un comentario injurioso de un madridista y haber dejado el de un antimadridista, cuando la única razón para eso (si realmente ha sucedido) es la que consignamos ahora: es muy triste no dar abasto en la lectura y gestión de insultos, pero eso es exactamente lo que nos sucede ahora.
Y como no damos abasto, no nos resta sino optar por una solución taxativa: todo comentario que contenga un solo insulto, una sola ordinariez, una sola calumnia o difamación, será eliminado de inmediato en su totalidad. Irá a la papelera por brillante que sea (suele pasar) el resto del texto. Nada nos dolerá más, pues es lacerante comprobar la cantidad de comentarios brillantísimos finalmente arruinados por una última línea insultante. Sin embargo, haríamos mal en sucumbir al sentimiento de culpa por ello, pues el único responsable de lo escrito es quien lo escribe.
Lo advertimos. No habrá ediciones parciales, borrando frases o expresiones sueltas, para a continuación entrar en contacto con quien dejó el comentario para explicarle amablemente el porqué de la censura. No habrá discusiones con personas que se sientan víctimas de agravios comparativos "porque se ha borrado mi insulto pero se ha dejado el de ese otro" (si usted lamenta la supervivencia de un insulto, ¿por qué lo practica, en el entendido intento de que el suyo sobreviva? Hemos llegado a leer cosas parecidas a esta últimamente: "Dice muy poco en favor del administrador de esta web el que te haya dejado publicar esa barbaridad, hijo de puta". Te ríes, sí, pero es tan sintomático que duele).
Esta nueva política se practicará, por tanto, de manera discrecional, y no entrará en discusión la conveniencia o no de cada decisión. No se aplicará de forma retroactiva por la misma razón que antes indicábamos: no daríamos abasto para borrar todo lo que, por desgracia, ya se ha colado. Es una tabla rasa que empieza hoy. Como sucede con algunas cosas de la vida, se hará pero no se hablará de ello.
Estamos orgullosos de nuestros lectores. Y queremos estarlo mientras La Galerna dure, sin matices y sin excepciones.
Un saludo y gracias por su comprensión.
Me parece perfecto, sobran palabras en nuestro léxico como para opinar sin necesidad de utilizar vocabularios soeces que restan credibilidad al mensaje, se puede enfatizar de muchas otras formas. Ánimo y adelante
Es una pena asistir a otro triunfo de la corrección política. Cuando el insulto se convierte en un fin en sí mismo, o en la expresión de un pensamiento mezquino, sí es pertinente acabar con el comentario que lo contiene, pero a veces un insulto es la forma más pertinente de describir un hecho o a su autor. La palabra gruesa puede ser, también, ese poco de pimienta que realza un texto, y la literatura está repleta de ejemplos. Eliminar cualquier comentario con una palabra malsonante es degradar la frescura del lenguaje y encorsetarlo en la odiosa tiranía imperante: La de la cultura de la apariencia y el dictado de lo políticamente correcto. Una pena.
La literatura está repleta de muchas cosas, Séneca. Poner la frontera es realmente complicado. Pero lo haremos bien, nada tema.
Un saludo.
Soy usuario de La Galerna desde casi (puede que incluso literalmente) el primer día y aunque en estos asuntos en que mezclamos fútbol e internet lamentablemente hay una tendencia a que el tono de las conversaciones y exposiciones acabe por no ser el más correcto, considero que no es necesario ni ser soez, ni soberbio, ni faltar a nadie para elaborar un buen texto. Es una pena que se tenga que recurrir a esta medida, pero si no hay más remedio personalmente la aplaudo porque considero que se hace desagradable leer según qué cosas. Hay foreros que exponen de manera brillante sus opiniones, a veces muy duras, y que estoy convencido que serán capaces de hacerlo sin necesidad de verse afectados por esta medida.
Muchas gracias por su comprensión.
Será difícil cuidar el lenguaje en temas puntuales, pero haremos lo mejor posible para mantener la forma. Que se lo pregunten al redactor del portanálisis, seguro se amarra los dedos para no escribir una que otra cosa. Saludos galernautas, un abrazo.
Nos tiene dicho el Padre Suances que un poco de contención viene bien para alcanzar la Gloria. Muchas gracias por el esfuerzo.
Me parece bien pero tengo dudas. Lo que sigue es una pregunta seria:
Ya que nos llaman vikingos, ¿se puede llamar indio a uno del atleti o culerdo a uno del barça?
Gracias.
@Rascayú
En relación a lo que comentas de llamarnos Vikingos... hey a mucha honra. 🙂
Hace unos días tuvieron el acierto aquí en la Galerna de entrevistar al enorme Paco Gento (ningún jugador en la historia tiene su palmares), y en la entrevista tratan de aquel que era el mejor equipo del mundo, y se hablo de las copas de Europa que lograron -- Bien, el nombre de Vikingos viene justo de entonces. Aquel equipo arrasaba en Europa en tal forma, que en la prensa internacional los compararon con las invasiones vikingas, arrasando el continente.
El Madridismo acepto el símil, y quedó. La afición quedó identificada como Vikingos.
Asunto peliagudo y no tan simple de juzgar, obviando los casos de “trollismo” descarado.
Aun está viva en mi mente la primera vez que mi padre me llevo a un partido de futbol de los de liga. Diría que lo más sorprendente para mi mente de niño fueron, a la par, lo verde del campo, lo colores de los equipos, pero sobretodo los gritos de los aficionados. Y entre ellos estaba mi santo padre, un castellano educado y amable, de los de chaqueta y corbata casi permanente. Esa energía colectiva en forma de protestas, insultos, griterío (sincronizado para un lado) me impresionó y hasta me asustó.
Años después, ya adulto, fui yo el sorprendido de verme gritar e incluso insultar al árbitro o al defensa que tumbó a nuestro delantero. Tal era la falta de objetividad que la pasión lo podía todo. O todos ganábamos o todos perdíamos (ya fuera por culpa del árbitro, el entrenador o tal jugador).
Los medios online como La Galerna me recuerdan un poco a esa pasión subjetiva y desatada del estadio local. Estamos aqui para (leer y) “defender” a nuestro equipo, con toda nuestra energía y, a veces, mala educación.
Quizás ayudaría el tener la posibilidad de eliminar el comentario malsonante por el propio autor. Estoy seguro que no soy el único que no se siente orgulloso de ciertos mensajes escritos en el fragor del (antes/durante/después) de un partido.
PD.: mientras escribo escucho RMTV live...que gozada... y palo más grande para muchas de las luminarias de prensa, radio y TV.
Perfecto. Gracias
Que buena solucion, para que los mal ablados se marchen donde les corresponda,Chiringuito, Teledeporte, cuatro, etc etc etc y el resto que opine del Madrid lo que quiera o sepa o pueda.
Aunque a veces es difícil, cumpliré con lo que se nos pide.
Saludis al equipo de la Galerna y a todos los participantes, (salvo a los que vienen a incordiar).
Pues así debe ser.
Aviso al moderador, hay un comentario a las 8,29 de alguien que ha suplantado mi nick. Me parece intolerable que se viertan
opiniones usando este método y que no exista ningún control.
No lo encontramos. Quizá ya lo hayamos borrado. Me alegra mucho que se nos trate como el medio con prestigio que ya somos, pero a la vez no tenemos más remedio que señalar que no tenemos los recursos para tener un sábado a las 8:25 AM a alguien pendiente de moderar y/o comprobar la autenticidad de los nicks.
A menos que esté ud. de broma y se refiera a su propio comentario inapropiado, en cuyo caso nada de lo que digo tiene sentido, claro.
Acabo de darme cuenta que es un post antiguo, retiró lo escrito.
Me parece perfecto. El español es un idioma tan vasto que se puede dejar en ridículo a alguien sin tener que recurrir al insulto. Pero, el problema radica en la censura. He sido víctima de esa censura en La Galerna por discrepar con el autor del hilo, sin mediar insulto alguno, por mi parte. Nadie contactó conmigo para explicármelo, ninguna de las dos veces. (Por cierto, las dos, del mismo autor). Luego, la explicación dada en este artículo, no me parece completa (iba a poner que me parecía falsa pero, por si las moscas, no lo pongo).
¿Es ponerse la venda antes de la herida para justificar censuras a la discrepancia? Hace algún tiempo, no dudaría de la honestidad. Deapués de lo que me ha ocurrido ¡dos veces! Ya no estoy tan seguro.
No entiendo nada, a mi me aparece, en este post, un comentario con mi nick, pero de fecha 8 de Febrero de 2017 a las 8, 29 y que posiblemente lo hiciera yo, pero de su respuesta deduzco que Vd. no lo detecta lo que me desconcierta y no se a que se refiere en lo de mi comentario inapropiado. Y no, no estoy de broma.
A ver si lo entiendo ahora. ¿Ud. me regaña porque no detecté como fake un comentario suyo que posiblemente no era fake? Creo que definitivamente está de broma.
No pretendo regañarle en ningún momento, lo único que quiero es aclarar un malentendido que tiene su origen en un post de hace un año y que al aparecer hoy otra vez yo he tomado como nuevo , ya que evidentemente yo tampoco puedo recordar todos los articulos en los que he comentado.
Lamento mucho si le ha molestado mi comentario y en lo sucesivo me fijare más en la fecha los post por si son repeticiones inesperadas.
Creo que es triste tener que matizar este tipo de cosas, pero también que es necesario que quienes participamos en estas páginas podamos discutir de una manera correcta a pesar de nuestras discrepancias.
Siempre será mejor que cada uno regule su conducta, procese bien sus ideas y teclee con respeto. Y, si no hay otra opción, tendrá que ser como decís.
En todo caso, trataré de medir mis palabras para contribuir a que el debate sea como debe de ser, apasionado pero educado.
Salud.
No hace falta leer todos los comentarios de la web para detectar quien infringe las reglas, le bastaría con leer solo los del tal comunero ya que el 90 % de los insultos y de las faltas de respeto de la página se deben a este sujeto. Sé que es imposible que la galerna eduque a alguien que carece de las más mínima educación, pero haría bien en controlar a este tipo de individuos ya que suelen ser los causantes de que la podredumbre arraigue en estos foros. Pueden por ejemplo revisar sus comentarios en el último artículo de quillo barrios, creo que apelativos como charnego de mierda o miserable, definen por si mismo el nivel de usuario en cuestión.