Así se curan las hernias

Buenos días. Renovarse a morir rezaba aquella máxima que bebió en origen de las fuentes de la mercadotecnia. Sin embargo, el alarde de Marca today, que oscila violento entre la temeraria osadía y la desfachatez absoluta, viene a recordarnos aquel programa añejo de televisión en el que un señor cualquiera se marchaba entre bambalinas para volver travestido de Whitney Houston. Hoy Marca nos propone una lluvia de estrellas (renovadas) con Gareth Bale a la cabeza. Sí, el mismo, como lo leen, como lo ven, como lo oyen. Sí, sí, ese. El futbolista incapacitado, el Walking Dead, el defenestrado, el atleta, el de la protrusión, el estandarte de la nueva nomenklatura del soviet periodístico deportivo patrio: The Hernia Chronicle. Pocos renovarse o morir resultaron tan evidentes como aquel de Marca, aunque en esta disyuntiva fuera el óbito el que primara ante cualquier crisálida.

Hoy la Hernia deshace lo andado. Se hace la sueca. Y lo hace además tomándonos por desmemoriados pazguatos. Como si nada. Publica a Bale en su primera plana, el expreso gripado de Cardiff haciendo corazoncitos, y pretende que aquella ignominia discal quede, como si nada, durmiendo el sueño de los justos. Es verdad que tras cierta Perestroika, Marca parece mejor orientado a los sueños y deseos de todo hincha merengue. No obstante, no parece de recibo emplear en este caso la muy noble táctica del avestruz, que introduce la molondra en el Campillo con la esperanza de no ver depredadores en el horizonte. Es simple, que diría Mourinho. Con un "nos precipitamos, pero la información de la que disponíamos en ese momento..." nos hubiera valido. Seguramente. Sabemos aceptar disculpas.

Pero, claro, el cuore galés de hoy resulta tan ridículo como hubiera resultado ver la primera plana del Washington Post pidiendo el voto para Richard Nixon después de que Woodward y Bersntein publicaran el escándalo Watergate en 1974. Un dislate, un esperpento, una majadería, un disparate, un desatino, pongan el sinónimo que prefieran. Por no mencionar todo aquello que subyace tras esta portada y que nos conduce directamente de El enfermo imaginario de Molière a la Paranormal Activity de la Ouija. No se trata únicamente de alucinar dragones y pepinillos cuando uno ve a un tipo lisiado liderar la política de renovaciones de un club, sino de flipar en colores de las cosas que se suscriben en Concha Espina, donde, ya lo saben ustedes, ni hay modelo, ni hay director deportivo, ni fax, ni gaitas.

La molicie absoluta, vaya.

Es por eso que los muchachos de Alfredo son hoy aquellos que saltan todos juntos sobre la cubierta de un trasatlántico con la esperanza de hacerlo zozobrar. Como si fueran chinos –por muchos- y resulta que resultan –valga la redundancia- en unos cuantos camboyanos. Dailly Ouija, cual alimoche u cualquier otra ave rapaz, busca sangre de aquella carnaza más vulnerable.

En estos días de asueto veraniego la víctima predilecta es James, del que hemos podido leer en la Ouija online bodrios periodísticos tales como que el colombiano no ha celebrado un gol en un entreno. Paren las rotativas. Las encuestas acerca de su venta, cesión, fichaje o traspaso se suceden y aquí, en La Galerna, nos preguntamos inocentes y timoratos si dos años son suficientes para construir la autopista Cúcuta-Barranquilla que quería levantar FloPer en Colombia como para desprenderse tal que así del colombiano.

Y como se va el caimán, hoy los focos apuntan a Isco, máxime tras el scoop de As ayer que ya desgranó nuestro portanálisis precedente. Francisco Alarcón, aquel futbolista oprimido por los estamentos del club por su mera nacionalidad hispánica, resulta que dice no a una oferta de la Juve para seguir peleando la titularidad en el mejor club de la historia.

Hombre, no es lo de Bale en la portada de Marca, pero casi.

La cuota de humor del día corresponde no obstante a nuestro trovador favorito del rinconcito, lírico de la música de viento y un muchacho estupendo. "Piqué va fuerte", anuncia Mundo Deportivo a bombo y platillo y el diario de Godó, grande de España, no parece equivocarse.

O sí, según como se mire.

Dice el siempre ponderado Gerard que el Barça es el mejor equipo de “este país” con diferencia. Y, claro, no nos atrevemos a afearle la frase en virtud a una duda que nos corroe...

¿A qué país te refieres? ¿Al estelado? ¿Al rojo? ¿A la matrix blaugrana?

A lo mejor resulta que a ti también, como a Ney, te convienen unas vacaciones extra cariocas para aclarar conceptos geoestratégicos.

Neymar Junior amplía sus días de asueto en Brasil y sumará la friolera de 107 días sin ponerse la camiseta del Barcelona, explica nuestro amic Mascaró en su columna de Sport. Menos mal que se aplicará un plan físico especial para ponerse a tono. Desde aquí le recomendamos que ese plan incluya batucada, caipirinha y hasta caipiroska.

Así se curan las hernias.