El Real Madrid, con la novedad de Asensio en el once, facturó ante el Mallorca el partido más espectacular que se ha visto en el Bernabéu en mucho tiempo, incluso haciendo abstracción del largo paréntesis Covid sin fútbol en Concha Espina. Sucede que existe el riesgo de sobrevalorar hasta los acontecimientos más notables, y que esto no trata de jugar cada cuatro días el partido más espectacular, sino de ganar títulos a base de consistencia y regularidad. La tentación de dar mucha importancia a la exhibición ante el Mallorca es grande, y no obstante conviene intentar evitarla, como conviene relativizar la relevancia de aquel hat trick de Asensio. A mi juicio, el siguiente partido liguero, ante el Villarreal, vino a rubricar lo que trato de exponer.
La tentación de dar mucha importancia a la exhibición ante el Mallorca es grande, y no obstante conviene intentar evitarla, como conviene relativizar la relevancia de aquel hat trick de Asensio
Asensio metió tres goles a sus ex isleños, y parece herético tratar de poner esa hazaña en sus justos términos. No obstante, me parece una hazaña puntual que, en mi opinión, no debería modificar la hoja de ruta de Carletto como parece que lo está haciendo. Metió tres, pero no fue el que más aportó en cuanto a creación de juego por parte de los cuatro atacantes desatados. Tanto Benzema como Rodrygo o Vinícius crearon más, combinaron más, generaron más, dicho sea todo ello sin restar ningún mérito a un jugador excelente que se permitió un hat trick y otras dos ocasiones claras, una de ellas desde el córner.
La nueva ubicación de Asensio sobre el campo, la que le ha buscado Carletto, beneficia enormemente el juego del balear pero, tristemente, esto no tiene por qué ser bastante para concluir que lo mejor que puede hacer el técnico es modificar el esquema para dar cabida a Marco. Tras dos victorias en el Meazza y en Mestalla, poco brillantes pero muy meritorias, llegó un partido supuestamente menor como el del Mallorca. Carlo modificó la formación (de un 4-3-3 de probada eficacia a una novedosa suerte de 4-2-3-1 para abrir hueco al balear), y la cosa salió a pedir de boca. Pero eso no implica que sea una variante que deba necesariamente tener continuidad.
La nueva ubicación de Asensio sobre el campo, la que le ha buscado Carletto, beneficia enormemente el juego del balear pero, tristemente, esto no tiene por qué ser bastante para concluir que lo mejor que puede hacer el técnico es modificar el esquema para dar cabida a Marco
Ante el Villarreal hubo cambios en los nombres, pero se mantuvo ese 4-2-3-1 también para dar paso a Marco, pero este vez sin hat trick del balear. De hecho, pasó prácticamente desapercibido, resumiéndose su aportación a un gran saque de falta que casi convierte en gol Militao. A cambio, el Madrid perdió mucho peso en el centro del campo. La mejor prueba se dio en el segundo tiempo, cuando hasta la inclusión de un muy desacertado Camavinga otorgó una solidez a la zona ancha inédita hasta ese momento del encuentro. Para dar paso al francés sin al mismo tiempo ser cruel con Asensio, el sacrificado fue Rodrygo. Asensio pasó entonces al carril derecho, donde tantas veces le hemos visto ahogarse sin desborde ni presencia efectiva. Es decir, justamente allí donde no queríamos verlo.
Ancelotti ha admitido públicamente que le gustaría convertir a Asensio en aquello que fue Di María para su primer Madrid, el primero de Carlo. El Madrid de la Décima. Pero Asensio no es Di María, y pocas cosas apuntan a que pueda llegar a serlo, al menos pocas de las accesibles a los que vemos las cosas desde fuera. Son jugadores parejos en cuanto a talento y capacidad técnica, pero el argentino cubre mucho más campo, su estajanovismo es legendario y su capacidad de brega proverbial. Todo ello le hace ideal para ese puesto “inventado” por Carletto. Asensio no tiene esas condiciones, y nada parece indicar que esté en su ADN el adquirirlas. Tiene otras virtudes, no esas.
Ancelotti ha admitido públicamente que le gustaría convertir a Asensio en aquello que fue Di María para su primer Madrid, el primero de Carlo. El Madrid de la Décima. Pero Asensio no es Di María
El equipo estaba funcionando bien con un 4-3-3 en el que Vinicius cubría tanta banda que era casi un 4-4-2, con Valverde por la derecha. Sobrestimar la improbable dimarización de Asensio para cambiar ese esquema ganador se antoja peligroso, sin perjuicio de que puedan usarse ambos (esquema y jugador) ocasionalmente y ante determinados rivales. Todos queremos que Asensio sea una estrella, pero la esperanza de lograrlo no pasa por tirar cada noche, insistentemente, del cielo para abajo.
Fotografías Imago.
Asensio es superior a Di María en técnica y potencia de golpeo, pero en la brega, en la brega no puede competir con nadie de la plantilla, si lo hiciera..... Sería mejor que Modric.
Jugador para el Arsenal.
O mejor aún, para el Mónaco
Asensio no es superior a Di María en nada. Otra cosa es que sea un futbolista aprovechable y con unas cualidades técnicas excelentes. Desde luego en banda no puede jugar. Es mejor que ocupe tres cuartos de cancha donde tiene más espacios y puede usar su zancada y su disparo. El problema es que Asensio podría funcionar en un sistema 442 jugando como 7 de segundo punta o en un 424 con rombo arriba, ocupando posición de 10. El Madrid juega con 433 y eso hace que no haya posición para Asensio salvo en banda o donde el otro día contra el Mallorca. Quizá podría jugar con Valverde y Casemiro o con Camavinga pero no creo que pueda entrar con Modric o Kroos. Ahí está el tema.
Asensio no es Di Maria, nunca lo será y está a cien millones de kilómetros de tener para el Madrid la importancia que tuvo el argentino. En un Madrid normal, en tiempos normales, ya hubiera salido hacia destinos menos exigentes.
Partido muy entretenido, como casi todos los del Madrid esta temporada. Otras veces jugamos mal (Inter o Valencia) y ganamos, hoy hemos jugado bastante bien y perdimos. Lo del lateral hay que solucionarlo ya, y con eso quiero decir que Nacho no puede jugar ahí. Antes que a Nacho prefiero a Santos, Miguel o incluso Camavinga. Lo de Hazard, lamentable para un jugador de su calidad, meritorio si se tratara de un canterano. Por lo demás el equipo no estuvo tan mal. Presionó mejor, no bien, pero mejor, y fue mucho más dinámico que el día del Villareal. Camavinga estuvo notable, al igual que Valverde. Vinicius fue muy incisivo pero estuvo desacertado de cara a gol. Es impresionante que jugadores de primer nivel como los nuestros centren tan mal y disparen desde media y larga distancia aún peor. Cuantos goles marcamos desde fuera del area? Cuantos de los innumerables centros que hemos metido hoy han llegado si quiera a ser rematados? En serio, a veces no somos capaces ni de levantar el balón del suelo. Aún así creo que el grupo es bastante asequible y que el Madrid tiene equipo para seguir avanzando en la competición. Eso sí, hay que corregir el problema de los laterales y mejorar de cara a gol. Mejorar los centros y los disparos desde lejos, nos daría más opciones ofensivas. Lo que no se entrena, no mejora.
Fuego amigo
Otra campaña calcada de las que ya conocemos.
Cuando lleguen las semifinales de Copa de Europa la media sin combustible y jugadores que ahora están en plantilla no me extraña que en Enero ya hayan cogido las maletas.Vete
buscarles entonces . El Madrid con el trasero al aire . Los jugadores hoy son top y mañana un incordio . Es más ,si el empeño es vender a alguno lo vendes con esta táctica en las rebajas.
Asensio cada vez que juegue , examen final.
No es beneficioso para el club ni para la plantilla. A quién le beneficia esta presión. Asensio sale y juega . Si lo hace bien estupendo, si no al banquillo. Uno más y punto. Pues no , hay que meterle la lupa a diario. Si no mete tres goles, casi mejor. Se lo regalamos al primero que pase.
Carletto cuenta con Asensio, tiene contrato .
¿ A quién beneficia meterles presión a ambos ? Los rivales se frotan las manos .Follón en el Madrid, cuando va líder, ya se enterarán cuando aflojen. Ya tenemos suficiente con espéctaculos como el de Sevilla. Pues no, nosotros mismos nos las apañamos. No vamos así a ningún lado.
El resto de los compañeros qué pensarán cuando un jugador que mete tres goles al siguiente partido ya le descalifican .
Jugar en el Real Madrid termina siendo un tostón para muchos entrenadores y jugadores.