Cada vez parece más probable que se reanuden las competiciones futbolísticas en España para poder finalizarlas y, aunque se desconocen fechas y condiciones concretas, nadie duda de que los encuentros se disputarían a puerta cerrada. Salvo algunas excepciones, como el Prípiat C. F. o el F. C. Chernóbil, los equipos de fútbol no tenían contemplada una situación acaso parecida a la actual, de modo que carecen de protocolos de actuación definidos para solucionar el problema que se presenta con los partidos pagados por sus abonados que no van a poder ser disfrutados de manera presencial.
A bote pronto y sin conocimientos económicos, lo más lógico sería pensar que se devolviese la parte proporcional al producto adquirido que no podrá ser consumido por motivos ajenos a todo el mundo, incluido Florentino Pérez. Pues bien, el Barcelona no contempla esta opción. Y no la contempla porque no puede. Tiene menos dinero que uno que se está bañando.
Este problema no debe ser motivo de vergüenza si se enfrenta de manera honesta; se informa al abonado con claridad y se le ofrecen diferentes opciones. Después, el afectado decidirá si acepta, se hace el sueco, se miente a sí mismo o inicia acciones legales.
El alipori racional se produce cuando el club —que es más que ídem— apela al compromiso y al sentimiento de pertenencia. Porque está mintiendo. El problema es que ese dinero que cobró ya no lo tiene y no encuentra la manera de conseguir liquidez para llevar a cabo la medida. Y arroja excusas como que sus abonos son más baratos que los de Hacendado, que con ellos pueden ver hasta partidos de waterpolo sobre patines, que siempre han sido muy buenos con todos los socios, etc. En resumen, el inherente fariseísmo culé.
La situación es parecida a cuando te invitan a una boda y te excusas aduciendo que tienes que bañar a tu pez, lo que ocurre es que, en esta ocasión, la novia es la afición blaugrana y el novio el propio club.
No contentos con decir al socio que el caballo blanco de Santiago es gris metalizado, acusa a otros clubes de populismo. Como al Getafe, que ha decidido no cobrar el abono de la próxima temporada. La clásica táctica de esparcir porquería y atacar a todo lo que se mueva para evitar que las miradas se posen sobre uno mismo.
Los palmeros barcelonistas alegan que no se puede comparar al Getafe, que es una Sociedad Anónima Deportiva, con el Barcelona, que es de sus socios. Es cierto que la naturaleza de ambos clubes es diferente, pero también su tamaño, su riqueza y su capacidad para adaptarse a situaciones inesperadas. Por lo que es mezquino alegar esa diferencia para justificar que el Getafe sí pueda tomar una medida incluso más ventajosa para el aficionado que la que sería adecuado que tomase el Barcelona. Es bochornoso como un multimillonario que aduzca que no puede bajar su salario y acuse de vendehúmos al mileurista que decide reducir cien euros su sueldo para que el resto de los trabajadores puedan mantener su empleo.
Como dice el refrán, en esta ocasión, el abonado culé, además de meretriz, aporta el lecho.
El barça se comporta como un partido de izquierdas, da lo mismo cual. Cuando te roba, siempre intenta hacer creer que lo hace por tu bien.
Por lo menos el partido de izquierdas te da la vana ilusión de hacerte creer que es por tu bien, pero los partidos de derechas,da lo mismo cual, te roban y encima no entienden que te quejes.
Las opiniones son como los culos.
Uno, de joven, se creía de izquierdas, hasta que conoció bien la condición humana; especialmente, la que abundaba entre el personal que pulula por las formaciones de izquierda; hipocresía y cinismo para dar y "vender".
A los abonados culés si aceptan las razones de Bartolo y Cía les diría
SARNA CON GUSTO NO PICA
Un saludo y feliz descafeinado San Isidro
Este fariseísmo culé que tan acertadamente se describe aquí, como las bochornosas excusas que se han esgrimido, es posible y se muestra con desfachatez, gracias a la complicidad y aquiescencia de los medios deportivos. Tanto los de allí, que venden sus fantasías de forma descarada aunque la realidad les lleve la contraria, como la nacional, bautizada por Piqué como de Madrí, que ni investiga, ni critican ni ponen en tela de juicio la fantasía que despliegan sus colegas cataculés. Pero eso sí, vender que los problemas crecen y se multiplican en el Real Madrid, aunque esas mismas supuestas tribulaciones en otros equipos sean algo bueno y ventajoso según ellos mismos, se les da de maravilla, es más, parece ser su razón de ser.
La tomadura de pelo proviene de la directiva culé y sus pueriles excusas cocinadas en la prensa cataculé que sirve este ilusorio maná a sus feligreses culés.
La estafa y fraude la perpetran los demás medios deportivos que miran a otro lado y nos hurtan la información a los ciudadanos, aficionados, usuarios a los que se deben y no dan el servicio público del que alardean además de tildarlo de excelente para más inri.
Se me olvidaba, ya lo sabéis:
Mientras en el campo solo está el rival a batir, el enemigo, ése que te quiere mal, anida en los medios. 😉
Cuándo nos daremos cuenta de lo que representa el cuarto poder..Prensa..quién la domina tiene el poder...el Farca en ERTE. Y en Madrid en la ruina...y dale que te pego, día tras día la misma canción. Os recomiendo a todos escuchar cada día a Richard Dees. Con eso ..sobra más palabras..Después de oírlo cada día..dices. y ahora que escucho...si solo hay, Trileros, Carroñas, Jorge Javieres, etc.etc. Menos mal de los Podcast. Y eliges pues la A.M. y la F.M. dan "ASCO".
Aaaahhhh. Y la Galerna para leer algo ..fresco y normal.
No recuerdo haber visto decir ninguna verdad a la Farsa en muchos años. Sobre casi nada. Ya fuese el dinero que costó Neymar, o el más reciente "Barça-gate". Tienen menos credibilidad que un vendedor de crecepelo. Y el mismo sentido del ridículo, ninguno.
Puix, la reacción de The Tinglao no se ha hecho esperar. Ya han salido a la luz pública noticias sobre el posible amaño en un partido entre, ¡oh causalidad !, los azulones y el Villarreal. Entonces, dice un servidor de ustedes, preguntando, ¿ por qué no investigan todos los posibles partidos amañados con el "més que un club" como beneficiado por el resultado ?. Olvidémonos del chocolate del loro y vayamos a lo substancial.
...jesjesjes...quería escribir "casualidad" y ha salido "causalidad", jesjesjes...posiblemente un lapsus...me habrá traicionado el inconsciente.