Minutos antes del partido entre Espanyol y Real Madrid, en Cornellá no se hablaba de otra cosa que no fuera el sobrecogedor gesto de Atlético de Madrid y Barcelona con los refugiados. “¡Una camiseta de apoyo!”, exclamó uno cerca de los micrófonos de ‘Canal Plus’ al filo de las 15:45. “Eso sí es señorío y no donar un millón de euros”, subrayó otro. Era tal la repercusión que en los videomarcadores pusieron la señal de ‘Al Jazeera’ para que todos vieran que el resto del planeta también hablaba, como el ‘AS’ en su portada, del ‘Camisetazo’.
En cuanto acabó la cerrada ovación a colchoneros y culés, la pelota echó a rodar. Y lo hizo con Casemiro al lado de Modric en el centro del campo. Rafa Benítez decidió que era buen día para dar descanso a Toni Kroos y empezar a mostrar sus rotaciones. Ya se dará cuenta que haga lo que haga, se equivoca. El entrenador del Real Madrid es el único que nunca acierta.
Caicedo avisó nada más empezar, pero Keylor Navas le recordó al mundo entero que este año sí hay portero en la meta merengue. Estirada válida para la foto y disgusto evitado. A partir de ahí, el Madrid empezó a crecer. Cristiano Ronaldo apartó la crisis a latigazos, ayudado, dicho sea de paso, por el planteamiento suicida de un Espanyol que decidió adelantar su defensa ante el ataque más rápido del planeta. Durante la primera mitad Bale hizo de Bale y de Isco, siendo el propio malagueño el más flojo dentro del terreno de juego, ya que no consiguió adaptar sus virtudes al frenético ritmo ofensivo de su equipo.
En homenaje a Juanito, a él mismo y a Raúl -por lo que iba a venir un rato después-, Cristiano puso el 0-1 en el 7’. Lo hizo tras una asistencia de Modric que no se enseña en las escuelas porque nadie es capaz de imitarla. El portugués definió al palo largo, dejando claro que la temporada acababa de empezar para él. Poco después del cuarto de hora, penalti provocado por Bale para que el actual Balón de Oro pusiera el 0-2 desde los once metros.
El segundo tanto le dio al Real Madrid toneladas de tranquilidad para afrontar el resto del choque. El equipo se desató -especialmente la BBC-, Modric empezó a jugar como si estuviera en el patio del colegio y los ataques se sucedían con vértigo. Bale, que poco a poco va aprendiendo a jugar al fútbol pese a padecer una hernia, cayó a banda izquierda para servir en bandeja el 0-3 a Cristiano.
El Real Madrid decidió cerrar la primera mitad con una obra de arte de la BBC. Bale conduce -¡un tuercebotas conduciendo un contragolpe!- y Cristiano asiste a Benzema tras un pase medido del galés entre líneas. Precisión quirúrgica para terminar de aniquilar a un Espanyol que no sabía si era el día de homenajear a Raúl Tamudo o al tridente merengue.
Por si acaso, homenajearon a los dos.
En la segunda mitad el ritmo bajó y el Real Madrid convirtió el choque en un Trofeo Carranza. Benítez empezó a dar descanso a los titulares y minutos a los menos habituales. Lucas Vázquez fue el que mejor aprovechó su oportunidad. Descarado y muy vertical, se adaptó rápido al guión del encuentro. Hizo daño. Quiso subirle las revoluciones a un partido que, con semejante goleada en el marcador, parecía de mediados de agosto.
Uno imagina a Rafa Benítez disfrutándolo desde el banquillo. “Aquí tenéis, histéricos”, pensó en algún momento de la segunda mitad. Y es que, uno no olvida la que se desató en este país tras el empate de la primera jornada. Hasta Telecinco estuvo a punto de suspender Sálvame para dedicarle programas enteros a la crisis del Real Madrid, pero apareció Belén Esteban, dijo que estaba feliz con su nuevo novio y se suspendió la iniciativa.
En medio del relajado panorama, Cristiano, que solo se relaja cuando duerme -y a veces ni eso-, anotó otros dos goles para poner el listón en cinco. Pichichi en un rato. Se permitió, incluso, el lujo de fallar un sexto. Mientras tanto, Keylor, que apareció cuando la orgía no se había iniciado -cómo echaba de menos el Real Madrid un portero que sacase el guante cuando toca y no cuando enfocan-, dejó una intrascendente intervención para el recuerdo. 280 minutos sin recibir un gol. Mal gestionado lo de David De Gea, sí, pero Rafa Benítez tiene un gran guardameta a sus órdenes.
Así todo, el Real Madrid sigue sin perder, sin encajar goles, sumando buenas sensaciones y cuenta ya con siete puntos en su casillero. La crisis de Cristiano Ronaldo duró hasta el doce de septiembre, aunque poco tardará el periodismo patrio en buscarle otra al club blanco, ya que vivir sin manipular es poco rentable.
LAS NOTAS:
Keylor (7): Apareció con 0-0 y se lució casi al final con una enorme intervención. Hay portero, que no es poco.
Carvajal (6'5): Su competencia con Danilo beneficiará al Real Madrid. Aprovechó su oportunidad en Cornellá y cumplió con creces.
Pepe (6): Si llega a aparecer con una tumbona y gafas de sol nadie lo habría notado. Partido comodísimo para él.
Sergio Ramos (7): Caicedo le duró un rato, lo que tardó en secarle tras dos intentos de arrancadas. Se jugó el tipo en un despeje en la segunda parte.
Marcelo (5’5): No ofreció los recursos que suele ofrecer arriba y tuvo algún fallo en el comienzo. Aun así, choque cómodo para él.
Casemiro (6’5): De menos a más, supo ponerle cemento a la medular merengue y darle libertad al virtuosismo de Modric.
Modric (8): Como en el patio del colegio. Se lo pasó en grande y nos lo pasamos en grande.
Isco (5): El más flojo del equipo. No supo adaptarse a la velocidad del juego merengue.
Gareth Bale (8): No sabe jugar al fútbol, pero asiste, desborda y genera. En Cornellá ofreció una gran versión.
Benzema (7’5): Marcó y volvió a demostrar que, cuando quiere, es el mejor aliado de sus compañeros y una pesadilla para los rivales.
Cristiano Ronaldo (10): ¿Merece que mis comentarios ensucien su exhibición?
Kovacic (5’5): Entró en un partido decidido y con tintes de pachanga. Se le vio poco. Cumplió.
Lucas Vázquez (6’5): Eléctrico, con ganas y dejando buenas acciones. Firmó una asistencia.
Varane: Apenas tuvo cuarto de hora ante un Espanyol sin ideas.
Minuto 1:30 disparo del Espanyol, paradón de Keylor.
Para los del plus, disparo del Espanyol que se va fuera, ni tan siquiera les extraña que el arbitro pite corner.
Buen artículo pero soy un Mariodelasherasliber. Está muy por encima de cualquier crónica de los medios tradicionales. Me gusta más su puntuación pre-Logse en lugar de la puntuación de Primaria, creo que da más matices.
Pareces mi "querido" antiguo profesor de Fisiología. Estírate un poco en las puntuaciones, que se lo merecieron. Por poco no les cateas a todos