Resultó toda una ironía que el día que se destapaba el pastel en la Ciudad Condal nos tocara al silbato el primo del editor de La Galerna. De Burgos Bengoetxea hace temible a cualquier rival. También al Elche. Le elchen lo que le elchen y disculpen por el chiste, amigos galernautas. Curiosamente dos penales acabó pitando el muchacho, aunque en sentido inverso a lo que estamos acostumbrados y los que otros presuntamente acostumbraban vía facturas.
Sin embargo, el Madrid, por fin, encontró en la Liga un partido plácido. Tuvo mucho que ver su timorato adversario, encogido, con la soga del descenso firmemente arrimada al cuello. Ocho minutos tardó Asensio, el sustituto sobre el verde de Vinicius —sancionado, ya saben— en, precisamente, hacer de Vini. Marco recibió en tres cuartos, caracoleó con presteza y se coló con soltura en el área entre dos defensores ilicitanos, para, tranquilo, batir con la zurda seco y raso a Edgar Badía. Un gol de bandera, como los que acostumbra Asensio Willemsen. Si Robert Redford susurraba a los caballos, Asensio lo hace a los golazos. Parece mentira que el balear proceda del mismo club que luce hoy como estrellas a dos estrafalarios patibularios.
El Madrid percutía con regularidad al ritmo de un Ceballos inspirado, feliz en su regreso a la titularidad. Los merengues iban acumulando ocasiones esporádicas. Militao, incorporando el misil tierra-aire a sus ya exuberantes registros, disparó desde su Sertãozinho natal para rozar la escuadra de Badía, asustado, con ese aire de Thibaut Courtois adolescente mojigato. Benzema, en plancha de cabeza, y Fede, con un latigazo desde la frontal, pudieron ampliar la ventaja. El pobre Elche ni estaba, ni se le esperaba.
A los 30 minutos, el central Roco palmeó cantosamente con la mano un centro al que rondaba Benzema maligno. Bengoetxea no tuvo más remedio que pitar penalti. Karim por la escuadra hacía el segundo. Y haría el tercero del Real al filo del descanso, también desde los once metros, después de un penaltito sobre la bota de Rodrygo.
3-0 al descanso y partido resuelto. Hacía tiempo que no estábamos tan tranquilos en la Liga de Tebas a la hora de cambiar el agua al canario
Comenzó festivo el segundo tiempo con Rodrygo abriendo en la banda el tarro de las esencias. Pisaditas, caños y paredes de alto standing con Karim. Se auguraba sufrimiento para el Elche, máxime cuando a los cinco minutos de la reanudación un fantástico pase largo de Ceballos —otro más— dejó a Goes en posición franca en la esquina del área. Quebró y disparó. La sacó bien Badía con las manos. Después lo haría con los pies, también ante Rodrygo. Incluso un resbalón ilicitano favoreció a Benzema para nueva atajada del portero del Elche.
Hubo incluso momentos de los Harlem Globetrotters , con pase de Goes a la remanguillé y mirando al tendido que, sorprendentemente, Karim envió fuera. También Camavinga, de regreso a la medular, se animaba desde lejos. Alaba mostraba oficio bávaro en el lateral izquierdo. Un centro del austriaco acabó con una tijereta de Asensio a la que respondió con muchos apuros un angustiado Badía. Sin noticias del Elche el partido mutaba a pachanga por momentos. Tampoco había nuevas de Carlo, tan reacio a mover a veces el banco aun con el marcador tan abultado. Noche tranquila para el Zorro de Reggiolo. Tanto que, finalmente, a los 67 minutos se animó con un triple cambio. Se retiro Ceballos y entró Modric, ambos ovacionados.
También entraba el cuasi inédito Odriozola, otrora Puñal de la Concha, por Carvajal, así como Tchouaméni en lugar de Valverde. Hasta Mariano hacía acto de presencia en el cuarto de hora final para descanso de Benzema.
Es decir, todo sentenciado desde el primer periodo, el segundo acto resultó en un extramente placentero epílogo. La rúbrica a tanta fantasía —con rabonas de Militao y todo— hoy en el Bernabéu la puso, eso sí, el hechicero balcánico. Se puso nervioso Modric dentro del área para hacer el cuarto de la noche en la escuadra del Elche. Hasta entraba el prometedor Arribas mientras Asensio recibía unos merecidos aplausos. Todo bonito.
Vienen días muy difíciles y hay que llenar las alforjas.
Que nadie dude que el Madrid va a pelear esta liga. Y sin facturas.
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Está muy muy difícil la liga, pero hay que seguir peleando
Partido demasiado cómodo para el Madrid. Han rotado jugadores que era importante ante los partidos que se avecinan y el Madrid sí ha gustado, aunque se han perdido balones en el medio campo que ante equipos mejores podría ser peligroso. Queda liga y.......... ¿ por qué no? Nunca nos rendimos. Hala Madrid
Partido fácil, pero bien jugado, muy dinámico el centro del campo con Ceballos y Camavinga. Benzema subiendo de revoluciones y Alaba bastante bien de lateral. Creo que la alineación más cómoda sería Courtois, Carvajal, Militao, Rudiguer, Alaba, Tchouameni, Ceballos, Camavinga por la izquierda, Valverde derecha, Vinicius, Benzema. Rodrygo hizo un partidazo. Ahora viene lo duro.