El Real Madrid repitió el resultado del año pasado contra el Girona y se llevó una victoria muy importante.
Ancelotti decidió hacer cuatro cambios con respecto al último partido. Sorprendió la suplencia de Asencio. Tchouaméni formaría pareja de centrales con Rüdiger. Mendy sustituía a Fran en la banda y Modric y Güler ocupaban los sitios de Ceballos y el lesionado Rodrygo.
El Girona es un equipo muy propositivo y eso quedó claro desde el primer momento. Los locales llevaban el peso de la mayoría de ataques mientras el Madrid alternaba presiones adelantadas poco eficaces con repliegues algo pasivos que no impedían crear peligro al Girona. Hubo varias situaciones de disparos que podrían haber costado un disgusto. También centros que afortunadamente no encontraban rematador, pero venían de situaciones ventajosas.
Por su parte, el Madrid encontraba muchas dificultades para sacar el balón controlado, pero cuando lo conseguía disfrutaba de posesiones no demasiado peligrosas. Una de las mejores ocasiones llegó tras un robo de balón, pero Mbappé perdió el duelo con el central local.
El Real Madrid repitió el resultado del año pasado contra el Girona y se llevó una victoria muy importante
Un poco después, tras una circulación larga, Bellingham cedió a Brahim en la frontal y el disparo del malagueño fue repelido por Gazzaniga. No era una jugada casual, el Madrid ya empezaba a recuperar el balón más arriba y a acercarse algo más. El gol de Bellingham vino precedido de un gran desborde de Brahim y un mal rechace de Miguel Gutiérrez. El inglés encontró un balón de oro que punteó con violencia para hacer el gol de ventaja con el que llegó el Madrid al descanso.
Al comienzo de la segunda mitad, el Madrid tuvo una gran ocasión en la cabeza de Tchouaméni. Modric puso un gran balón y el remate fue bueno, pero centrado. El Madrid estaba bien. Controlaba y recuperaba rápido. En el minuto 54, Bellingham recibió un gran pase de Modric y tras darse la vuelta vio el desmarque de Güler, que definió a la perfección como si fuera un 9. Era el 0-2.
Pero no todo podían ser alegrías y Bellingham en el 59 se tuvo que ir lesionado. Entró en su lugar Ceballos. Sin embargo el Madrid no se detuvo: Modric vio el desmarque de Mbappé, quien desde la derecha definió a la perfección e hizo el 0-3.
El Madrid tocaba a placer. En parte disfrutaba del partido, en parte reservaba fuerzas para lo que viene. El caso es que estaba muy cómodo. Mbappé estuvo a punto de hacer el cuarto en el 73 tras otro pase de Modric.
En el 80 cayó Mendy. Es desesperante lo de las lesiones. Ancelotti aprovechó para meter a Fran, Endrick y Asencio y quitó a Mbappé, Valverde y el lesionado lateral. El delantero brasileño tuvo una ocasión muy clara en el 83, pero el último control fue largo y perdió la opción de chutar o pasar a Güler. El Girona lo intentaba a través de Danjuma, pero Courtois estaba atento. En el 87 entró Yáñez, debutante juvenil, por Güler.
Cerca del minuto 90, Endrick recibió un fuerte golpe en la cabeza que pareció afectar a sus cervicales. Nada más relevante ocurrió.
Getty Images.
Me ha gustado el partido; parece que empezamos a mejorar. Esperemos que dure. Gil Manzano, indigno; es demasiado antimadridista y mal intencionado. Oriol Romeu un cobarde y un cerdo y los que han aplaudido su agresión a Asencio... se descalifican solos.
Hala Madrid y a seguir.
El tal Romeu, muy valiente con Asencio y Yáñez. ¡Esos coj... con Rüdiger!
De menos a más el equipo. Flojos primeros 35 minutos, el equipo partido y con pocas ideas en ataque. El gol de Bellingham lo cambió todo. La presión alta empezó a funcionar y la velocidad del balón subió, a lomos de un gran Bellingham y unos buenos Modric y Guler. También mejoró Mbappe, con muy buenos desmarques. Parece que lo de Bellingham ha sido un susto y podrá estar el martes, no así Mendy.
Bellingham es el que ha hecho entendido a la perfección lo que comporta vestir y defender la camiseta del Real Madrid
Otros como Rudiguer, Braim se le acercan mucho, e indudablemente todos y cada uno de los veteranos
Feliz noche madridistas
Corazón blanco y cegato de la ONCE ,la de estupideces que dice en su análisis futbolístico ,virgen santa este genio ,ni Bielsa oye
No tan grandes como las suyas y sin necesidad de insultar.
Si el dominio inicial del Gerona se convierte en gol, ahora no estaríamos tan eufóricos.
De momento no hay motivos para la esperanza.
Empezamos como siempre, andando, sin velocidad que es la que provoca espacios y crea peligro.
Ancelotti, más de lo mismo.
Como persona bien, como entrenador ni personal ni técnicamente.
Saludos a todos
Como el clásico “sí mi abuela tuviera ruedas, sería una bicicleta”… Es una estrategia como otra cualquiera, que permite llegar a los últimos 20 minutos de encuentro con mucha mayor energía que el adversario. Generalmente, los equipos más “pequeños” intentan salir a tope para intentar conseguir algún gol rápido, encerrarse atrás y aprovechar, después, alguna contra en ventaja. Pero, en su último tercio de partido -y, a veces, antes- están cansados y dejan más espacios. Si, además, no han conseguido ese gol, son víctimas propiciatorias.
Así ocurrió los dos últimos años, incluso contra los equipos más grandes de Europa. Eso sí; de lo que hay que asegurarse es de no cometer errores flagrantes atrás ni regalar balones pero, éso es otra cuestión.